Muchos de vosotros estaréis teletrabajando. Esa nueva forma de trabajar a la que nos hemos adaptado porque, como dice la canción “The Show Must Go On”. Al parecer ha venido para quedarse y como tal, hemos modificado nuestras rutinas, nuestros tiempos y nuestras formas, entre ellas las formas de vestir.

Quizás recuerdes la entrevista que realizó la BBC al académico Robert Kelly en 2017 para hablar sobre la tensión política que atravesaban las dos Coreas en aquel momento. Pues bien, quizás fue la situación más comprometida en la que se vió Kelly y te podrás imaginar la de la niñera. 

En el momento de aquella entrevista nunca hubiéramos imaginado que podríamos encontrarnos en la misma situación  que Kelly, no de esa manera tan embarazosa sino trabajando delante de un ordenador desde casa. En muchos casos trabajando de traje y corbata, pero ¿qué hay de la pantalla para abajo? En ocasiones pantuflas 😅

Y es que, si la situación lo permite, estamos muy tentados a tirar de la manta y las pantuflas. Esto también sucede en nuestras clases de baile online. Entendemos que no es lo mismo que asistir a clases presenciales, ni mucho menos a un social, pero por sobre todas las cosas las clases tienen que conservar su esencia. 

En la comunidad de Alfonso y Mónica ponemos todo nuestro empeño para interactuar con nuestros alumnos y estamos encantados del feedback que se produce. Es como estar en la academia pero, si cabe, de una forma más acogedora y llegando a muchísimos rincones y a personas maravillosas. Nuestra Comufamily, como hemos dicho en varias ocasiones ♥

Tu bailas y los tacones lo saben

Sobre todo en el caso de las chicas, hay una gran diferencia entre aprender a bailar en zapatos planos, a bailar en tacones, concretamente en tacones de baile. Cuando te fijas en bailarinas de un nivel más alto, con esos movimientos estilizados y esa sensualidad en los contoneos, los tacones juegan un papel importante. ¡Ojo! hacen falta más que tacones, pero sin duda darán un toque más estiloso a tu baile.

Es muy importante la elección del zapato de baile. Como recordarás, en otra entrada del blog te dimos unos pequeños consejos acerca de dónde y cómo comprarlos y cuál se adapta mejor a ti y a tu nivel. 

Hay un detalle a tener en cuenta, y es que si en el día a día no estás acostumbrada a llevar tacones, te resultará más difícil hacerlo al bailar. ¡Que no cunda el pánico! Vamos a aprender a caminar con tacones y a cuidar mucho nuestros preciados tobillos. 🏃‍♀️

Cuestión de actitud

No quisiéramos dejar pasar un detalle importante acerca de lo más o menos estilizado que se puede ver el baile, y es que son muchos factores los que se conjugan para lograr que tu baile sea lucido. Cuando disfrutas lo que haces se nota. 

Creemos que todas las personas que han decidido entrar en este maravilloso mundo del baile les gusta lo que hacen, pero hay una pequeña diferencia entre gustar y sentir. Sentir es algo así como cuando oyes el Requinto o el Bongo y tu cuerpo empieza a vibrar a su ritmo.

El Requinto te llama, te invita a salir a la pista. Ya llevas el ritmo en cada paso que das cuando vas a buscar a tu pareja, lo sientes en el pecho y en el abdomen. ¡Lo vives! Cuando conectas con ella, transmites. “Sentir” es que cada roce, cada expresión y cada movimiento vayan cargados de una sabrosura elegante.

Nosotros como profesores te introduciremos a la musicalidad, a las posturas, a los básicos, al ritmo, la cadencia y te proporcionaremos todas las muchas herramientas para construir un baile “sentio” pero, por supuesto, el sentimiento lo pones tú, y como dijimos no hace mucho: “El ser perfectamente imperfecto/a te hace único”

Así que, ponte tus tacones con sentimiento.

¡Hasta pronto bailarines!